googleec0300c30f0b2b44.html Indígena de la tierra.: julio 2014

martes, 1 de julio de 2014

Los Durmientes.

Con una visión algo pesimista comienzo este texto:

No vengo a decir lo que la gente debe hacer, ni mucho menos aquello que hacen mal reprocharselo en cara, pues no soy yo quien os va a juzgar, ni ninguna divinidad suprema ni siquiera el Dios todopoderoso que creó aquello que existe y aquello que no.Vengo a expresar mi apatía.

Estoy bastante harto, en definitiva. No creo en buenas esperanzas, no creo en buenos actos, si no son remunerados. No creo en acciones no pagadas ni tampoco en pensamientos impropios. La gente se encuentra tan harta de todo tanto como yo que simplemente vemos el río pasar. El mismo rio que pronto nos arrollara y nos llevará con él al principio del mar y al final de todo. Tengo la necesidad de escribir, y está es tan grande que sale de mis huesos, cruza mi piel y se fusiona con el aire que me rodea. Pero este aire está tan podrido que envenena mi piel, mis huesos y mi alma.

No creo que sea una persona pesimista. No creo que mi visión de este mundo sea algo tan meramente irracional como para llamarlo vertedero. Como persona y como ser pensante, que cada vez son menos, tengo que decir que quiero llorar y gritar al mundo entero para que cesen de caminar. ¿Caminar hacia dónde entonces?-me preguntan. No lo sé, no tengo las respuestas ni siquiera sé si me estoy haciendo las verdaderas preguntas. Pero sé que tenemos que parar de caminar.

Gente que quiere corregir el rumbo; gente que cree que con pequeños cambios todo se soluciona y dejar que la vida siga su curso es su manera de pensar. Gente inteligente ¡Qué demonios! Gente mucho más lista que yo, que sabe escribir mejor, y que sus pensamientos alcanzan cumbres mas altas. Gente con carreras mas evolucionadas, con padres que les enseñaron y que fueron sus focos de vida, hermanos mayores inteligentes y sin ninguna barrera para desarrollar su mente lo maximo posible. A esa gente que de tantas oportunidades solo puede pensar en si misma les digo: Culpa no tenéis ninguna, creó que yo si me encontrará en la posibilidad de ser egoísta y meramente pensar en mí dejaría de hacer lo que hago, pero por suerte o desgracia, es está la vida que tengo que vivir y no otra, y esta en mi el deber de aceptarla.

Esto no va dirigido para nadie en especial. Solo para la gente que veó al caminar por las calles de mi ciudad.

Por último y como siempre para la gente mas importante: Aquellos que intentais cambiar el mundo, no lo dejéis. Sois vosotros los próximos líderes; sois vosotros los prófetas de un mundo mejor. Yo creó en vosotros y espero que nunca dejéis de contar con mi ayuda. Por intentarlo y por no parar en ello os alabo y os quiero.

Y cerrando el texto os digo: Adios, y no combies.