Ánima

Perdone si le molesto con mi introversia, pero me gustaría hablar con la persona que se encuentra en el fondo de esa cueva de dudas e interrogantes, de agobio y de constantes desmoronamientos de felicidad.

Me quería dirigir a ti, como única merecedora de mis elogios y pedirte mis mas sinceras disculpas de que tanto yo, como el resto del mundo no sabe tratarte ni entenderte. Intentan curarte ya sea con pastillas, llevándote a loqueros o intentando atraparte con ritos vudús. Eres pura y muy sensible, y por eso te dañas fácilmente, te remiendan y no paran de ponerte parches y tiritas donde los daños ya están hechos. Ya Platón te consideraba como la dimensión mas importante al ser humano, y hablaba de ti como si estuvieras encadenada  a nosotros, presa de una carga que no debes de llevar, yo en este instante pienso lo mismo, no somos merecedores de tal premio, si un don como este se nos ha sido otorgado deberíamos de ganarte como se gana un premio, y celebrarlo como se celebra una boda.

Nos pasa  como el niño que tiene un juguete que nunca  usa y nunca lo hace en falta, hasta que un día este desaparece y el niño llora y patalea por que no encuentra el juguete con el cual él no jugaba. No nos damos cuenta de lo poco que seríamos si tu querida nos faltaras, y por eso yo te quiero, te mimo y te cuido hasta el fin de mis días.

Te quiero Alma.